El aparatoso artefacto, construido en 1941, pesaba más de una tonelada y tardaba tres segundos en hacer una multiplicación
/ Universidad Politécnica de Madrid
BERLIN (DPA).- Tenía el tamaño de un gran armario de pared, pesaba más de una tonelada y tardaba tres segundos en hacer una multiplicación: el aparatoso artefacto se parecía poco a las modernas computadoras ultrarrápidas y de bolsillo, pero fue hace 70 años el primer eslabón de una cadena que desembocó en ellas.
El ingeniero alemán Konrad Zuse (1910-1995) la presentó en un taller de Berlín un 12 de mayo de 1941, ante unos pocos científicos y en medio de una indiferencia generalizada.
La "Z3" multiplicaba, dividía y obtenía raíces cuadradas. Fue la primera computadora programable y también la primera que funcionaba con un sistema binario. Su capacidad de almacenamiento era de 64 palabras.
"No hubo ninguna repercusión, ni prensa ni eco mundial: el tema del momento era la guerra", explica ahora Horst Zuse, hijo mayor del visionario alemán.
Por eso, Zuse decidió esperar a la posguerra y en 1946 fundó la primera compañía de computadoras, con la que construyó la "Z4", primer modelo en ser comercializado.
Pero el éxito económico no le llegó jamás: la competencia dentro de Alemania y en Estados Unidos aumentó rápidamente y la endeudada compañía Zuse terminó siendo adquirida por Siemens en los años '60.
La creación del pionero de la computación pudo haber quedado en el olvido de no ser por Horst, hoy de 65 años, que siguió los pasos de su padre y estudió electrónica e ingeniería informática.
A mediados del año pasado, el segundo Zuse presentó una reconstrucción perfecta de la "Z3", cuyo original había quedado destruido el 21 de diciembre de 1943 durante un bombardeo.
La nueva versión exigió mucho tiempo... y dinero: "Uno podría haberlo utilizado para comprarse un bonito descapotable", comenta Zuse sin ofrecer cifras concretas.
Desde hace meses, el ingeniero lleva la reconstrucción a museos y exposiciones en todo Alemania. "El objetivo científico es mostrar a la gente cómo funciona una computadora", explica.
Y es que la "Z3" es más que una reliquia: "Mi padre desarrolló una arquitectura computacional nueva y revolucionaria que sigue siendo un estándar hasta hoy", asegura. Según Zuse, las computadoras ultramodernas siguen basándose en la idea de su padre.
La próxima oportunidad para ver de primera mano a la copia del enorme "bisabuelo" de la computación será a partir del 1º de julio en Paderborn, en el centro de Alemania. Allí será exhibida en el museo de Heinz Nixdorf, otro pionero de la computación.
ocupaba todo un sótano de la Universidad y consumía 200.000 W de electricidad.
Diario La Nacion - Argentina
No hay comentarios:
Publicar un comentario